Una parte de la energía y la actividad del aficionado a la espeleología se dedica a la búsqueda de nuevas cavidades. En nuestro entorno, muy humanizado, las entradas a cuevas y simas más evidentes han sido conocidas desde tiempo atrás.
Ahora, para poder encontrar alguna cosa nueva, o has de buscar posibles continuaciones en cavidades ya exploradas, levantando con frecuencia la vista y los potentes leds hacia el techo en vez de mirar al suelo, o has de buscar aquellos accesos que, por su ubicación o por sus características, han pasado desapercibidos.
Cuando haces prospección, empiezas a mirar los sitios donde hay algunas probabilidades de encontrar algo, claro. Una dolina, una diaclasa, el antiguo thalweg de una riera… la fracturación del terreno y los cursos de agua son los ejes más importantes que han de guiar nuestra recerca.
Recientemente me he dedicado un poco al rastreo de nuevas posibilidades. Un agujero que salió a la luz en el fondo de una pequeña dolina al ... seguir leyendo »
El pasado finde las condiciones dictaban calzarse los esquís después de las últimas nevadas, pero habíamos concretado visitar esta cavidad hacía ya un tiempo con diferentes personas, y eso hicimos.
La sima se abre en un terreno de conglomerado, posiblemente un antiguo sumidero que sigue una gran diaclasa del terreno. Tiene 200 metros de profundidad, buena cifra para ser en este tipo de piedra.
Localizarla no fue sencillo, la pista estaba tapada por la nieve y al principio la pasamos de largo. Después, llegar a ella presentaba también alguna complicación, la empinada canal de acceso se había convertido en un tobogán directo al vacío, por lo que tuvimos que colocar una cuerda.
Una vez dentro, la cantidad de agua me dificultó bastante hacer fotos, algunos pozos tenían ducha, y una pequeña gatera estaba ocupada por un buen charco que nos refrescaba la barriga. Al estar mojados, el vapor de agua que desprendíamos en bastante cantidad me obligaba a hacer las fotos con la ... seguir leyendo »
Esta vez no voy a presentar fotos de cuevas o similares, sino todo lo contrario. Presento cuatro fotos de lo que era un profundo valle, agreste y diverso en cuanto a riqueza ecológica, relativamente húmedo en una montaña muy seca. En el citado valle se encontraban, además, unas cuantas cavidades subterráneas, algunas muy adornadas, como la Arcada Petita, que pude visitar dos o tres veces antes de su destrucción. Porque si periódicamente escribo cosas y cuelgo fotos de cavidades del macizo de Garraf, se hace necesario comentar algo sobre el vertedero que durante unos cuantos años rellenó uno de sus valles más atractivos.
En 1972 empezó a funcionar como el basurero del área metropolitana de Barcelona. Decisión tomada por los políticos de turno sin escuchar las diversas opiniones contrarias, bien fundamentadas. A los pocos meses, la acumulación de basuras contaminó de forma irreversible las aguas subterráneas del macizo. Surgencias de aguas dulces que están por debajo del nivel del ... seguir leyendo »
La galería dels Macarrons es el cauce de una antigua circulación hídrica que llegaba a la sala d’Angkor. Tiene unas dimensiones constantes y regulares, con un suelo generalmente plano y numerosas estalactitas fistulosas que le dan el nombre. Dos niveles superpuestos, originados probablemente por la desviación del aporte de agua a causa de algún hundimiento u otro evento similar. Es uno de los ejes principales que une la cova de les Grans Canaletes con la cova de Canaletes.
Una red compleja como ésta, con numerosas galerías, algunas superpuestas, otras cortocircuitadas entre sí, con una estructura algo laberíntica, tiene un origen complicado y difícil de concretar. Los diferentes ríos y aportes originarios han ido coincidiendo en puntos y han variado su curso con el tiempo a causa de factores tectónicos, buscando siempre el camino más sencillo. Después, los procesos reconstructivos han hecho su trabajo.
De la sala d’Angkor salen diversas continuaciones, la galería dels 3 Guardians, ... seguir leyendo »