Después de una temporada haciendo más bien el turista, aprovecho las temperaturas suaves de estos días para hacer una visita a un pozo de Garraf. Aquí, la canícula aprieta fuerte de forma habitual. Para empezar escojo esta pequeña cavidad, dedicada en su denominación a uno de sus primeros exploradores que, después de realizada la exploración, en junio de 1954, se ahogó en la playa de Garraf.
Es un pozo sencillo y campaniforme, muy recubierto de concreción, que se localiza en la riera de Vallgrassa, cerca del Plà de Campgràs. En su tiempo, fue originado por la citada riera, luego, el agua fue excavando el lecho hacia un nivel inferior.
Si bien las numerosas cavidades que hay en los alrededores se caracterizan por la corrosión, es decir, la disolución de sus paredes por el efecto químico del agua y el dióxido de carbono, en ésta la reconstrucción, o sea, el crecimiento de las formaciones, es la nota general.
Recibe desde siempre muchas visitas, es una de tantas pequeñas ... seguir leyendo »
De pasada por Cantabria, vuelvo a fotografiar el laberinto de entrada de Coventosa. La otra vez me dediqué a la red fósil sur, ahora me dirijo a las galerías que bajan hacia la parte activa. En esta zona, que tiene por lo general amplios espacios con bóvedas que se pierden por arriba, hay rincones en los que las formaciones crecen con profusión.
Fotografiar espacios así no es sencillo. Has de portear el material necesario, relativamente pesado y voluminoso, llegas al lugar, lo sacas todo, el trípode, la cámara, cuatro o cinco flashes, los disparadores… haces la foto, lo desmontas y lo vuelves a guardar, sigues… cuando has repetido la operación tres o cuatro veces, acabas hasta el coco y decides que ya es hora de acudir al bar, idea que los colaboradores suelen acoger con entusiasmo.
Subiendo hacia Estós nos encontramos a la izquierda este magnífico valle, por detrás de las tucas de Ixeia. En frente, la vista constante del Perdiguero nos domina. Un poco más allá, se empieza a asomar el Gourgs Blancs. Al otro lado, y a medida que vamos ascendiendo, aparece una perspectiva diferente de la Maladeta.
Nos dirigimos primero hacia Batisielles, buen desnivel, mejores vistas. Un poco más arriba tenemos el ibón de l’Aigüeta. Desde aquí, la única posibilidad de llegar al de Perramó, el otro gran ibón de este valle, pasa por subir hasta la cresta de las agujas, por lo tanto, decidimos bajar directamente hasta los ibones de Escarpinosa. Aquí el terreno es complejo, entramos de lleno en un enorme canchal de bloques de granito.
Pocas veces en esta zona puedes disfrutar en verano de un día como el de hoy, con un cielo absolutamente limpio y claro durante toda la jornada, sin nubes y con poca neblina. Ni qué decir que lo aprovecho al máximo para hacer fotos.
Después de unas semanas tomando el sol vuelvo de nuevo a la oscuridad subterránea. Busco, por eso, una actividad de acceso rápido que no me obligue a patear mucho bajo el calor veraniego, que en Garraf pega fuerte. Decidimos dirigirnos al Avenc dels Esquirols, el cual hacía bastantes años que no visitaba, tantos que solo tenía algún recuerdo poco concreto. Antes se encontraba perdido en medio de un frondoso bosque mediterráneo, ahora se ubica en las proximidades de una urbanización no demasiado respetuosa con el medio. El entorno se ha degradado de forma ostensible.
Esta cavidad tuvo un cierto protagonismo en la historia de las exploraciones garrafeñas, era ya conocida de tiempo atrás y se inició su exploración hacia 1900. Está formada por una red de pozos no muy grandes que bajan hasta -184, muy concrecionados todos ellos, lo que ofrece muchas posibilidades para la fotografía. El pozo más largo, de poco más de 40 m, es bastante majo. Absolutamente aéreo desde el principio y de ... seguir leyendo »