Frustradas nuestras intenciones en el Benjamí Digon, al salir, decidimos visitar esta cavidad que se encuentra muy próxima, descubierta hace pocos años y para nosotros desconocida. En este lugar, Campgràs, tienes donde elegir. Es un campo de lapiaz y dolinas literalmente agujereado, en un espacio de medio kilómetro de largo por unos 200 metros de ancho podemos encontrar algo así como 25 simas diferentes.
Un embudo de unos 3 metros acaba en una gatera que desemboca a su vez en una pequeña vertical sobre una sala bastante adornada por las formaciones, en contraste con la abundante corrosión que predomina en la cavidad vecina. En ocasiones se puede encontrar en la misma cavidad ambos procesos en diferentes zonas, probablemente, diferentes concentraciones de dióxido de carbono y de saturación del agua por los iones de calcio puedan favorecer uno u otro proceso.
A pesar de las pequeñas dimensiones, te permite sacar unas cuantas fotos majas.
Para llegar a la cavidad, lo más sencillo es salir de la gran dolina de Campgràs, en dirección al Pla de Querol. Buscamos un pino solitario y grande a pocos metros del camino asfaltado y seguimos recto, en pocos minutos divisaremos la gran fita que han hecho al lado de la cavidad. Primero nos encontraremos con el Avenc dels Trons, luego el Benjamí Digon, y un poco más allá, el Hanna Svacbroc.
Es una sima de lapiaz, con poca formación y mucha corrosión, pero también fotogénica. Las formas que adquiere la roca por la disolución también tienen su interés. Empieza con una chimenea, literal, un tubo vertical de dimensiones justas pero soportables, que baja algo más de diez metros. Lo creía algo más estrecho, por lo menos la boca, seguro que hace tiempo era algo más pequeña.
Después de la chimenea accedemos a una pequeña sala donde empieza a ganar volumen. Bajamos un par de pocillos por un recorrido complejo con diversas reinstalaciones, y llegamos a la curiosa sala formada por ... seguir leyendo »
El Montsec es un gran sinclinal calcáreo con un perfil muy característico y constante, singular encabalgamiento de medidas regulares, levantado verticalmente hacia el sur, y que se desarrolla linealmente paralelo al eje pirenaico. Su potencial calizo es grande, pero, a pesar de esto y de la cantidad de cavidades que se han descubierto, estas son de dimensiones bastante modestas.
Está atravesado perpendicularmente por dos ríos, los dos nogueras, que forman desfiladeros importantes, el de Mont Rebei el más espectacular. Desde lejos, su perfil es inconfundible, siendo el Montsec d’Ares, la parte central, el de mayores dimensiones. Curiosamente, algunas surgencias del macizo, las más caudalosas, vierten sus aguas hacia estos dos ríos, formando una circulación subterránea perpendicular al buzamiento, en sentido Este-Oeste. De esta forma, la Cova Negra de Corçà, que está colgada a unos 400 metros por encima del Congost de Mont-Rebei, formado por el Noguera Ribagorzana, podría haber funcionado ... seguir leyendo »
No puedo calzarme los esquís de montaña aún, la recuperación requiere su tiempo y no sería sensato. Pero aprovecho para probar las raquetas de nieve y me voy a dar un paseo por Cuello Gordo. Este itinerario tiene unas perspectivas magníficas sobre Ordesa y el macizo del Perdido, y muchas posibilidades fotográficas. Desde sierra Custodia la vista es aún mejor, pero mi intención era solo andar un poco.
Nunca había usado antes las raquetas, veo que dan buen resultado si los desniveles no son grandes, pero, en mi opinión, los esquís son sin duda mejores. Al ver pasar a tres esquiadores se me ponían los dientes largos.
Las fotos son anteriores a la gran nevada actual, ahora el paisaje será diferente.
El Avenc del Corral Nou está en el corazón de Garraf, cerca del sendero que, desde el Corral Nou se dirige a Can Jaques, una magnífica y aislada masía en estado ruinoso. El camino empieza zigzagueando una primera subida, luego empieza a llanear, a los pocos minutos encontraremos un hito de piedra que nos indica que la sima se encuentra a la izquierda, a unos metros del camino.
Hace un tiempo no era una sima muy visitada, la primera vez que estuve creo que casi no había ni spits, alguno tuvimos que poner para evitar algún rozamiento letal. Ahora el acceso en coche hasta el Corral Nou es factible, la pista está asfaltada, antes era casi impracticable.
La cavidad se abre en una dolina y consta de dos pozos unidos por una rampa. El primero fue originado directamente por la dolina, y el segundo crecería de forma inversa por las filtraciones. Está bastante adornada por la cristalización. En el fondo existe una cuerda que remonta hacia otros pequeños husos verticales paralelos, ... seguir leyendo »