El Bruc es una de las simas más majas y características del macizo de Garraf. Consta de una primera vertical de 91 m. y un segundo pozo que llega hasta los 115 de profundidad, muy adornados ambos pero en los que no es fácil hacer buenas fotos. En el primero porque el perfil es irregular, primero bajas unos 20 metros contrapared hasta un pequeño cuello de botella donde las paredes se acercan, luego se abre durante 25 m, bajas en aéreo por en medio del pozo hasta la siguiente reinstalación y otros 25 en aéreo, hasta que las paredes se vuelven a acercar; el último salto, de nuevo contrapared, baja por una gran formación. En el segundo, porque len la base no tienes un mínimo espacio estable para poder distribuir algún flash.
La boca, que se abre en el Garraf profundo, no es muy grande, tiene un diámetro de unos 4 o 5 metros. En ella hay una pared de piedra y cemento realizada para asentar el torno de la primera exploración, en 1898. Luego el pozo se alarga hacia atrás, y los 50 metros ... seguir leyendo »
Me explico, no me he tomado nada raro ni he sido abducido por ninguna secta, solo me he dedicado a descansar de cuevas y hacer el turista por la zona de Fisterra, aquello que los romanos denominaron el fin del mundo, Finisterre. Excelente lugar, por cierto. Que también hay vida más allá de la espele, y de vez en cuando hay que cuidar la salud.
Descanso de las cuevas, no de las fotos. Aunque no salen muy lucidas con este clima, la lluvia es lo más habitual. A veces cambia y se pone a granizar, pero en seguida vuelve a lo suyo. Incluso cuando sale algo el sol, cualquier pequeña nube te puede remojar. Invierno duro el que llevan aquí, por las contínuas borrascas atlánticas. Por un lado, tengo que ir secando continuamente el filtro del objetivo, siempre aparece alguna gota en medio. Por otro, el paisaje aparece difuso, el ambiente está lleno de microgotas de agua. Difícil hacer fotos nítidas de paisajes con tanta precipitación. Casi peor que en los barrancos. Es el reino del goretex. ... seguir leyendo »
Poco después de hacer las fotos del pozo, uno de los flashes se murió. El medio subterráneo es muy hostil y agresivo con los equipos de fotografía y los componentes electrónicos. La humedad, el agua, el polvo y los golpes no les sientan nada bien. Intento siempre usar más flashes antiguos, analógicos, que no llevan tanta electrónica y son más resistentes. Los actuales son más delicados, y mucho más caros. Lo que me sorprende es el buen resultado que me da la cámara, que lleva algo más de diez mil fotos bajo tierra, y aún funciona a la perfección. Y que dure.
Uno de los objetivos principales era hacer alguna foto maja de este pozo. Parece que el resultado responde a las expectativas que tenían mis colegas. La vertical es maja, se acerca a los 50 m creo yo. Y aquí cambia radicalmente el ambiente de la cavidad. La boca del pozo tiene un diámetro de unos tres metros, pero a medida que bajas, rápidamente se abre de forma importante. Las paredes del pozo están totalmente recubiertas de ... seguir leyendo »
El aragonito es una forma de cristalización del carbonato cálcico que, en condiciones normales, es poco estable y, con el tiempo, acaba convirtiéndose en calcita. Además, según las condiciones de humedad y temperatura su deterioro es más rápido aún. No es muy común y suele ser de color blanco puro, pero a veces puede tener otros tonos, sobre todo si contiene algún otro elemento, por lo general metálico. Cuando cristaliza puede adoptar diversas formas, pero son características las flores formadas por agujas frágiles, por lo que hay ir con cuidado para no romperlas.
Fotografiarlo bien no es sencillo, al ser tan blanco, es fácil quemar la imagen. También, al estar formado por cristales en forma de prisma con múltiples caras, que reflejan la luz en todas las direcciones, se obtiene un resultado poco nítido. Pero vale la pena intentarlo porque las flores de aragonito son espectaculares.
De forma deliberada no voy a citar la cavidad en la que he realizado las fotografías, con el ... seguir leyendo »
Mi intención el pasado finde era hacer alguno de los típicos recorridos de Tavascán, subir algún pico de los que hay por allí, el Pic de la Coma del Forn, o Ventolau, o algo así, pero la meteo nos hizo cambiar algo de planes. El sábado amaneció ya inseguro y amenazando nieve, y el domingo las nubes seguían amenazando desde las cumbres del valle.
Estos dos pequeños valles, Ribera de Cardòs, donde se ubica Tavascán, y la Vall Ferrera, son uno de esos rincones privilegiados de los Pirineos, agrestes y relativamente aislados, o alejados de los recorridos más habituales. Hacía un tiempo que no los visitaba.
El sábado nos pilló una pequeña nevada y por la noche volvió a caer algo de nieve, por lo que el domingo decidimos dirigirnos a otro lugar cercano pero que quedara al margen del microclima característico de los altos valles pirenaicos, donde seguían las nubes ancladas. Elegimos el Pic de l’Orri, un buen mirador de la zona. Me apetecía volver a subir, la última creo que lo hice ... seguir leyendo »