Después de un fatídico invierno de accidentes relacionados con la nieve llega el esquí de primavera, uno de los placeres de cualquier esquiador de montaña. Este domingo, 28 de marzo, le tocó al Garmo Negro, una montaña que nunca defrauda. Lo primero que uno piensa al llegar al balneario de Panticosa (a parte de desolación por su estado actual) es que allí no ha llegado la primavera. Es como si se hubiera parado el tiempo: toneladas de nieve rodean el balneario y aún se pueden hacer ascensiones con los esquís puestos desde el coche. Al grano: ascendimos el Garmo Negro por su vía normal y comprobamos in situ lo cargado de nieve que está, es una de las ascensiones en las que más tensión recuerdo haber pasado. Madrugamos (menos de lo que deberíamos) y subimos con el culo prieto (en tres horas estábamos arriba) viendo como los primeros rayos de sol provocaban purgas premonitorias en el manto. Disfrutamos del paquetón en la bajada y nos alertamos de ver gente que subía en un horario totalmente ... seguir leyendo »