Las nevadas tardías de abril no nos hacen olvidar que este ha sido un invierno templado y seco; y la escasa acumulación de nieve en nuestras montañas hace presagiar otro verano en el que desaparecerán los neveros en la mayoría de ellas y los pocos y menguados glaciares pirenaicos volverán a estar en las últimas.
Pero, ¿cómo ser mínimamente objetivos en esta percepción? ¿cómo cuantificar la nieve acumulada y valorar las reservas hídricas? Pues consultando a quienes más interés tienen en el control primario del agua en nuestro país, las Confederaciones Hidrográficas. Y es muy fácil.
El SAIH (Sistema Automático de Información Hidrológica) recaba continuamente los datos de múltiples estaciones de control hidrológico y meteorológico dispersas por las distintas cuencas (pértigas de nieve, pluviómetros, aforos de ríos, piezómetros, embalses, canales, calidad del agua…). Nuestro interés en la nieve nos lleva a centrarnos en aquellas que están en las áreas montañosas ... seguir leyendo »